Allí, que bien amor deleitado
en las duras y maduras
sol de las verdades y dorado
sol del privilegio y hermosura,
dulce sazón, febril sueño
sol delirante y risueño
sol delirante y risueño
emoción perdida de la muerte
catando y palpando suerte
obtusa, filosófica de lo indistinto
con la llama del alma en el laberinto.
Ivette Mendoza
con la llama del alma en el laberinto.
Ivette Mendoza