Como enigmas entrelazados a la rosa vida,
una mirada que viaja por el firmamento,
un suspiro de luces extraviadas,
una mirada que viaja por el firmamento,
un suspiro de luces extraviadas,
un contenedor de lenguas llama-viva,
de todo tiempo obsoleto compungido.
de todo tiempo obsoleto compungido.
Siente la mente el mordaz suspiro
trasmutado,
una tarántula suicida que se desnuca desde su interior,
una agonía de verdosa naturaleza
que se eleva con levadura a un mundo desgastado,
una mañana amartillada por la niebla.
una tarántula suicida que se desnuca desde su interior,
una agonía de verdosa naturaleza
que se eleva con levadura a un mundo desgastado,
una mañana amartillada por la niebla.
Soy razón de eco que se cierra sin
la fe
con palmeras que se abren a la
inmortalidad
para que una estrella nos alumbre.
¡Salta la palabra sedienta de melancolía!
cuenta los días en su tangible acontecer,
divaga el alma en su brisa de
ensueño.
¡Un canto dulce, una llama más!
Un boceto escueto haciendo lo
correcto.
Anida el pájaro, en ti en mí en mí
piel en todo lo creado.
Bebemos la sed del infinito que nos toma de la mano,
Bebemos la sed del infinito que nos toma de la mano,
a vivir un año luz, a salvarnos de la otra vida.
Ivette Mendoza