Related image

miércoles, 10 de enero de 2024

Las llamadas telefónicas ascienden hacia el más allá

 

Las llamadas telefónicas ascienden
hacia el más allá
donde tus lamentos se amputan
con generosidad:
En tardes como éstas, amordazadas,
una pizza pregunta insistentemente
entre las vírgenes del cigarro familiar
y trozos medianos del romanticismo.
En las tardes como éstas, amordazadas
la sangre fría anda sigilosamente
persiguiendo muertos
y una cotorra a mandíbula batiente,
mira reparar el día de anhelos.
La sinfonía entera suponía, chapodar
el abismo de la perturbación del alma,
mientras revotaba la aclaración del dicho,
mientras revotaba el pelo del consentimiento,
en la mandolina beata del oxido ladrón.
La altanería de la mano derecha te creyó
cuando distes una vuelta y muchas más
sobre la legión de lloros de seda en las
persianas milagrosas de tus ojos,
cuando pedían fuegos sin disimulos a
la clara lealtad sarrosa.
 
 
The phone calls ascend
towards the beyond
 
The phone calls ascend
towards the beyond
where your laments are amputated
with generosity:
On afternoons like these, gagged,
a pizza insistently asks
among the virgins of the familiar cigarette
and medium pieces of romanticism.
On afternoons like these, gagged,
the cold blood stealthily walks
chasing the dead
and a parrot with a clattering jaw,
watches the day of yearnings being repaired.
The entire symphony supposed, to splash
the abyss of the soul's disturbance,
while the clarification of the saying bounced,
while the hair of consent bounced,
on the beatified mandolin of the thieving rust.
The arrogance of the right hand believed you
when you turned around and many more times
over the legion of silk cries in the
miraculous blinds of your eyes,
when they asked for fires without disguises from
the clear, rusty loyalty.
Ivette Mendoza Fajardo