Páramo de Expresiones Revitalizadas
En este páramo abierto y revitalizado,
siluetas de semblantes sedados atraviesan,
perfumadas con fragancias de sutiles
abreviaciones.
Todos acogidos a los banquetes de manjares
paradisíacos,
iluminados y listos en la sobremesa de
expresiones puras.
Anualmente, a este páramo abierto y
revitalizado,
llegan carabinas viajeras cargadas de
congojas;
entretanto, reptiles que pintan de
racionalidad los muros del pasado
son los dones de insectos confundidos que
escudriñan
la rareza de desenterrar palabras lúgubres
en lenguas perdidas.
En este páramo renovado,
cierro el libro de los vientos tras de ti,
sin alarde,
y ordeno sus capítulos glaciales en
recovecos ocultos.
¡Compárteme este festín de oraciones!
¡Ven! Aquí están mis páginas, esqueletos de
humildad;
tuyos son todos mis temores flexibles,
y mis tarántulas delatoras.
Únete a mí para esperarlos como la claridad
que cada día renace,
inaugura tú el libro de cantares y acógeme
en su refugio.
Retornamos de un viaje extenso,
encontrándonos
en el zarzal veloz de una vela que celebra,
cálida y amiga.
Ivette Mendoza Fajardo
