Hay humos de escaleras que acortan
la zaina grieta
Nuestras grietas crujen en su libada
juventud
Las zurcimos con martillos aligerados
Y martillamos nuevas grietas entre
sus grietas
La grieta está hecha de la chanfaina
del chisguete que
Nos permitirá beber hasta desfogar
conservatismo
Y se escuchen apenas un espiche
espirituoso
Hay grietas donde hundimos nuestros
pasos en el
Idóneo hontanar donde sacamos la lágrima
orate
Se parten en tres veces tres
palabras entrecortadas
Increpando caer en la zaina grieta
abierta en mis manos
Son hoyos, alabanzas que se refugian
en sus artimañas
A la que hemos intentando morder el sobrado intento o
Para derrumbar el insulso lecho de
la piedra tóxica
Y probar que nunca subió a su
eyectado entorno
Porque no había un fomento dentro
del tormento
Ivette Mendoza