Pájaro de la muerte de alto vuelo e
inmaduro
hermosas manos donde va ardiendo
hermosas manos donde va ardiendo
pequeño dios, nariz de lata llamado
Epicuro.
Héroe hipocóndrico, sabor de
tribulación,
Agudos párpados, filosos dedos de
traición.
Pico de oro, de signos y de
constelación,
rompí su voz, quedo sin alas
rompí su voz, quedo sin alas
me arrebató el corazón, lo maldijo
un dios.
Madona, la reina astrónoma, reina
para dominar
se fue a quejar a un lagar, quedó dormilona.
se fue a quejar a un lagar, quedó dormilona.
Y el vino que disolvió la vida, dejó
la ira
dejó de convulsionar la niña lira,
la niña mira.
Madona, Madona la más quejona, la más llorona.
Madona, Madona la más quejona, la más llorona.
¡Dale muerte al pájaro, fuego a la
rama!
El alma más cerca, y Epicuro que te
ama
Suerte del mal, lagrimas a caudal
Epicuro inseguro, Epicuro inmortal.
Ivette Mendoza