Ambición de madera
que el árbol promete,
que el árbol promete,
delirante historia
que hacían las horas,
concurren y anotan
en la estrella y el aire
y mansamente ansían
lo veraz y lo existente.
que hacían las horas,
concurren y anotan
en la estrella y el aire
y mansamente ansían
lo veraz y lo existente.
Palmera de cristal,
tímidamente sapiente,
la copa iluminada
en sus hombros carga,
valor y fuerza
que la fortuna desea.
Ivette Mendoza