Traspasar el omoplato derrotista de la brisa
Traspasar el
omoplato derrotista de la brisa
y
encontrarle al tiempo su lado asmático
dos pulmones expatriados saliendo del humo de los muertos
ungüentos
plantados en la música del estómago
para revelar
la llanura de sus dramas
cabezas y
pies unidos a un ataque de melancolía,
pelotas cuadriláteras
transpiradas de gimnasias
rebotando y contando
historias de ventolina incierta
en los tranvías de la perfidia
como
ilusiones prohibidas que consumen
dedos dietéticos
de torturas.
Clandestinidad
de milagros ciegos haciendo
muecas lanzallamas en el
lavatorio de la niebla,
sentencia de
una tierra anoréxica y desolada
desodoriza
la arcilla de las verduras
fomenta lo
florido en crochet de un semidiós
que se nutre
de oro y plata sobre el deshielo
de sus
prioridades, además ostenta
la repetición
fusionada del mercurio como emblema,
como manera
de escape o como
manera de seducción
!Como manera
de vivir muchos siglos más!
Ivette Mendoza Fajardo