Del otro paraje infinitivo
Del otro paraje infinitivo
la magnetita relumbra con su ferocidad de león.
Lo geocéntrico es la última pinza gaznápira
de la noche
y la osadía se convirtió en un lingote de
pura vanidad,
fundido en la vasija de sus rutinas,
inmutables
y valiosas, marcando su enfoque ordinal en el
vínculo de sus éxitos,
sigue el curso su espíritu, un lapicero parlante,
se elevaba
sobre las pleuras frágiles del recelo, cada
tinta un
evidencia de batallas conquistadas e instrucciones
aprendidas.
A esta hora crecer se tornó en un acto de
engarrotar
sus anhelos, una silenciosa ordenanza donde
cada victoria
era un paso hacia un porvenir
inquebrantable.
Un pedal es el más soñoliento arnés de un manuscrito
¡Y la tecla del piano, un perno fastidioso
y distante!
y sacuden el resuello de locomoción activa,
como en el arsenal de su instinto, cada intrepidez
era un lingote forjado en el fuego de su
intelecto,
¿Un sonido dotado de hermosura en el
orden de sus procedencias?
From the other infinitive place
From the other
infinitive place,
magnetite shines with
its lion's ferocity.
The geocentric is the
last thieving claw of the night,
and audacity turned
into a lingot of pure vanity,
melted in the pot of
their routines, immutable
and valuable, marking
its ordinal focus in the link of their successes.
His spirit follows the
course, a talking pen, rose
above the fragile
pleurae of mistrust, each ink a
proof of conquered
battles and learned instructions.
At this hour, growth
turned into an act of seizing
their desires, a
silent ordinance where each victory
was a step towards an
unbreakable future.
A pedal is the
sleepiest harness of a manuscript
And the piano key, an
annoying and distant bolt!
and they shake the
breath of active motion,
as in the arsenal of
his instinct, each boldness
was a lingot forged in
the fire of his intellect,
A sound endowed with
beauty in the
orden of their
provenances?
Ivette Mendoza Fajardo