Muchas veces era un útero amargo
y labioso.
La neurosis de la luna en mi almanaque.
El bosquejo de las letras que sudaban constante
Al ovillarse hacia al otro lado.
La neurosis de la luna en mi almanaque.
El bosquejo de las letras que sudaban constante
Al ovillarse hacia al otro lado.
En su mala suerte, el árbol de
guayabo que creció
Torcido, detrás de la casa.
Como el hermoso Cuasimodo en su tuxedo
Como el hermoso Cuasimodo en su tuxedo
Tocando las campanas el día de
su boda, yo
La esmeralda de sus ojos.
Muchas veces sólo era un papalote sin cola,
Muchas veces sólo era un papalote sin cola,
Polifacética pero sin sentido
alguno queriendo
Retomar la trama de la
telenovela en un hilo fino.
Me protejo, dentro de la
concha de una
Tortuga, así se sienten menos
los golpes de la vida.
Te amo a cómo te ama el
usurero prestamista,
Nuestro amor tiene valiosos
intereses.
Un acuario de lágrimas será la
herencia que les dejo,
Lo demás lo he prestado.
La noche vengativa y agresiva
se apoderó de mí y
Me enterró sus cuchillos,
ahora convalezco en el
Hospital de cuidados
intensivos. La noche es un
Antro de violencia.
Ivette Mendoza